CAMINO DE SANTIAGO

CAMINO DE SANTIAGO

miércoles, 12 de agosto de 2015

LOS CAMINOS EN LA EPOCA DE D. JUAN MANUEL, SEÑOR DE VILLENA Y ESCALONA

En esta entrada queremos hablar de la figura de D. Juan Manuel, nacido el 5 de mayo de 1282, en el castillo de Escalona, propiedad de su padre, el infante Manuel, hijo menor del rey Fernando III.

Su figura histórica destaca no solo por su producción literaria, de la que no hablaremos aquí, sino por el gran dominio que ejerció sobre numerosos territorios peninsulares; y que en la práctica operaban como un auténtico estado enfrentado al Rey de Castilla Alfonso XI.

En esta exposición, basada en el trabajo realizado por D. Antonio Herrera Casado "EL ESTADO ITINERANTE DE DON JUAN MANUEL" para el I Congreso Internacional de Caminería Hispánica; podremos comprobar la amplia serie de territorios y lugares que estaban bajo su dominio así como y las vías de comunicación que se fueron formando entre ellos. De esta manera conoceremos la génesis de una serie de caminos que aún existen en la actualidad y cuyo trazado coincide en gran parte con rutas jacobeas que parten desde las zonas orientales de la península hacia Compostela, tales como el Camino de Santiago del Sureste y el de la Lana.


En el sistema social de la Edad Media, la nobleza detenta una serie de privilegios, entre ellos, la facultad de poseer la propiedad de grandes espacios de tierras denominados señoríos, y que de forma general se concretaban sobre un territorio bien delimitado. Sin embargo en el caso del Señorío del Infante D. Juan Manuel, cuyo eje principal era el territorio de Villena, veremos cómo se convertirá en un auténtico "Estado itinerante", que si por su parte meridional tuvo las características de espacio amplio y compacto perfectamente dominado, en su zona septentrional y occidental, estaba formado solamente por puntos físicos concretos (generalmente villas vigiladas por castillos) sin control del espacio alrededor, unidos por caminos expuestos al ataque del enemigo. Llegando así a controlar un buen espacio del territorio castellano en su cuadrante suroriental: Desde el Mediterráneo en Cartagena hasta el Duero en Peñafiel, puede decirse que se extendían sus dominios.


Como podemos comprobar en el mapa, dominaba un amplio territorio, que sería de una parte territorial compacto (el referido señorío de Villena) y de otra esparcido a través de amplias zonas de la Mancha y las dos Castillas en torno a los ríos Júcar, Tajo y Duero.


Aquí nos interesa exponer la capacidad de comunicarse todas estas villas y fortalezas entre ellas, por caminos amplios y seguros, y que no distan entre sí más de una o dos jornadas de camino. El mismo Juan Manuel en su "Libro de las armas", dice que podía caminar a través de sus dominios, de un confín al otro, pernoctando cada noche en un castillo o casa-fuerte de su propiedad, aunque entre uno y otro el territorio fuera extraño, o enemigo.



Este señorío de Villena estaba constituido por múltiples lugares, muchos de ellos repoblados inicialmente por el Infante, y otros estimulados en su crecimiento por Cartas-Puebla y privilegios que les permitió desarrollarse y poblarse en pocos años:

Castillo de Villena
La cabeza era Villena, enriscada población serrana, hoy en la provincia de Alicante, y tradicionalmente extremo sur del reino de Aragón, que cuenta con un extraordinario castillo que construyó a su pleno gusto. En sus cercanías, y sobre el cauce del río Vinalopó, poseyó también la fortaleza de Sax, sobre agudo peñón inexpugnable.
Castillo de Almansa
Extendido el territorio hacia las sierras más occidentales, y hacia la Mancha, en él contó con los siguientes lugares: Almansa, cuyo castillo edificó totalmente, con el aspecto que hoy restaurado tiene, y en su término inmediato la torre de Burriharón. 

Castillo de Chinchilla
Chinchilla, que era la localidad más densamente poblada del territorio, (y no llegaba entonces a los 1500 habitantes), con un castillo en lo alto del cerro que defendía el poblado y avistaba en la lejanía inmensas tierras de llanura, erigiéndose en fabulosa atalaya sobre los Llanos. En su término se encontraban aldeas ó alquerías como Albacete, La Gineta, Higueruela, Alpera o Pétrola:

En 1338 edificó Juan Manuel el castillo de Alpera. En Montealegre del Castillo, situado junto a la vieja torre de Pechín, Juan Manuel levantó una magnífica fortaleza que luego comandó su hijo Sancho Manuel, y que finalmente sería destruida por orden del Rey Pedro I, quedando hoy solamente muy leves huellas del mismo. Junto a Almansa estaba Carcelén, también repoblado y fortificado por el Infante y a las órdenes muchos años de su hijo Sancho.

Albacete poseía, como minúscula aldea en tiempos del infante, sobre el "camino real" de Villena a Toledo, un castillete edificado tiempo atrás por los árabes. Sobre ese "camino real" puso el Infante algunas pueblas nuevas, como el mismo Albacete, La Roda, La Gineta y Minaya; que fue entregada para su repoblación a Diego Fernández de Cuenca. La Roda comenzó a repoblarse en 1310, por un privilegio del Infante. Y la Gineta siguió desarrollándose junto al "camino real", cerca de Chinchilla.

La otra zona, (además del Reino de Murcia, del que tenía el título de "adelantado") que dominó el Infante Juan Manuel, se extiende muy ampliamente desde la Mancha albaceteña hasta el mismo río Duero. Prácticamente no poseía territorio alguno en ese área, sino solamente castillos aislados, algunas aldeas en torno de los mismos, incluso pequeñas torres vigías sobre los caminos que comunicaban unas con otras,  y que el Infante Juan Manuel construyó con una inteligente visión para el control de sus territorios.

En la actual tierra de Cuenca, además de Alarcón, poseyó Juan Manuel los lugares y fortalezas de Castejón, Torralba, Buendía, Villar del Saz, Zafra de Záncara, Huete, La Puebla de Almenara, Castillo de Garci Muñoz, Belmonte, El Cañavate, Iniesta, El Provencio, y muy cerca de Uclés inició la construcción de un gran castillo que no llegó a concluir.

En las orillas del Tajo, hoy provincia de Toledo, poseyó Escalona (lugar de su nacimiento, posesión tradicional de su familia), Maqueda y Santa Olalla.

En la tierra de Guadalajara, sobre el valle del río Tajo, poseyó Juan Manuel la villa amurallada de Alcocer, junto al Guadiela, más el castillo y aldea de Trillo, en la orilla del Tajo, y Cifuentes, uno de sus lugares favoritos, donde reunió su Junta de Procuradores en 1331. Todavía hacia el norte, y en camino del Duero, la villa amurallada y castillo de Palazuelos, cerca de Sigüenza, y la fortaleza de Galve sobre el río Sorbe, ya en la raya con Castilla la Vieja.

Sigüenza
Vistos ya los territorios señoreados y los castillos y villas adjuntas controladas por Juan Manuel a lo largo de su vida, podemos comprobar que con su actuación, quedaron fijados una serie de caminos o rutas a través de las que se unían firmemente sus posesiones e intereses. Así, los lugares dominados y poseídos por el Infante, vemos que se extienden fundamentalmente a lo largo de dos "caminos reales" de cierta importancia en la Edad Media. 

El "camino real" entre Villena y Toledo: Son esos los dos
Castillo de Escalona, Villa que le vio nacer
polos fundamentales en la vida de Juan Manuel: su residencia y la de su enemigo. Para él, ese "camino real" es el único que existe, el más importante. Como hemos podido comprobar, de Villena se sigue a Almansa, luego a Chinchilla, ya sobre la Mancha, y de allí por la llanura a Albacete, La Gineta, La Roda, Minaya, el Pedernoso (Belmonte muy cerca), Mota y Quintanar de la Orden. De allí a Toledo, por territorio ajeno, extendiéndose sus posesiones 
a dos puntos más aislados, pero también de crucial importancia en las comunicaciones, como son Escalona y Maqueda.

El "camino real" desde Valencia hasta Cuenca: El otro "camino real" de importancia y tránsito frecuente, era el que comunicaba Valencia y Utiel con Cuenca, pasando por Alarcón y la Iniesta (cerca quedaba el Cañavate), mas el Castillo de Garci Muñoz, llegando por Villar del Saz y Zafra de Záncara, con su fuerte castillo, hasta el enclave real de Cuenca. Desde allí, se continuaba hacia Burgos, otro de los centros de poder real y económico de Castilla, cruzando las sierras centrales e ibéricas, por Torralba y Priego, cruzando el Tajo por Trillo, pasando por Sigüenza y entrando en el valle del Duero por San Esteban de Gormaz.

San Esteban de Gormaz (Soria)
En todos estos "caminos reales" o sus derivaciones y proximidades, tuvo Juan Manuel situados sus más fuertes alcázares, las villas más populosas, o los simples puestos vigías que articulaban el control de sus gentes, de él mismo, sobre un amplio territorio circundante, al tiempo que le servían para trasladarse con rapidez y seguridad de una parte a otra del reino de Castilla sin tener que enfrentarse al azar de los problemas.

En la actualidad, muchos de estos lugares aquí señalados, son objeto del paso de peregrinos que encaminan sus pasos hacia donde dicta la tradición que se encuentra el Sepulcro del Apóstol Santiago, desde aquí queremos destacar la importancia de la figura de D. Juan Manuel, quizá el hijo más ilustre de Escalona, que contribuyó a la génesis de estas rutas cuyo trazado y uso permanece en la actualidad.


1 comentario:

  1. Julian gracias por esta entrada, poco a poco se va haciendo Camino y descubriéndose su verdad
    Yo también estoy estudiando este camino y el que venia desde Granada y saco la conclusión de que es el mismo que se unían en Toledo y pasando por Escalona y Cadahalso, llegaba a Santiago.
    Pero que ya existía muchos años antes del Camino de Santiago

    Saludos Ángel Sánchez

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